Necedad mata razonamiento

Se anuncia una reducción de la pobreza en México, pero alarma el aumento en falta de atención médica a 50 millones de mexicanos. Asimismo, la falta de una educación efectiva que vaya forjando y preparando a los niños desde los 7 años.

De nada sirve una reducción de la pobreza en pocos dígitos si todos los que han sido favorecidos tienen que gastar más de ese supuesto aumento en médicos y medicinas.

La edad no perdona y los adultos mayores requieren de más atención médica y medicinas, que al no tener esa atención por parte del seguro, toda la pensión se va en atención médica privada y bastante limitada por el costo que eso representa.

Este tema es el básico de los derecho humanos, donde esta dependencia está de adorno junto a su titular.

Este gobierno, en su afán destructivo, eliminó el seguro popular que atendía exitosamente a un sector amplio de la población sustituyéndolo por el Insabi, un engendro de supuesto seguro médico, que al no funcionar lo desaparecieron, dejando a miles de gentes sin una atención médica digna y efectiva.

Entre las propuestas de los candidatos aspirantes a participar en el 2024, las más importantes son la atención de la salud de los mexicanos en una forma digna y el retorno de la seguridad a todos niveles y en todas las ciudades.

El fortalecimiento de las policías estatales y municipales y la construcción de hospitales regionales debe ser prioridad en el siguiente gobierno.

El dispendio del gobierno actual en la cancelación del aeropuerto de la CDMX, los aumentos no previstos en las obras del AIFA, el tren maya y dos bocas llega a 500,000 millones de pesos, dinero tirado a la coladera por malas decisiones y malos presupuestos que podría haber apoyado sustancialmente a los conceptos de salud, educación y seguridad.

Nada más hagan cuentas, un centro médico regional con todas las especialidades, camas y equipo podría costar 10,000 millones de pesos y un hospital regional de 80 camas llegaría al costo de 2,500 millones de pesos.

Sin ningún problema se podrían haber construido 10 centros médicos regionales y  50 hospitales locales sin problema.

El problema es que,

“necedad mata razonamiento”