“Nosotros no torturamos” afirma Encinas en nuevo informe sobre caso Ayotzinapa
El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, rechazó las críticas de quienes aseguran que el informe de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia es similar a la llamada “verdad histórica” y de inicio subrayó “nosotros no torturamos absolutamente a nadie”.
Indicó que hay testimonios y colaboración de 115 personas que conocen o estuvieron involucradas en los hechos.
“Dicen algunos de los críticos que el informe no dice nada nuevo, que es lo mismo de la Verdad Histórica, lo cual es absolutamente falso”.
“La “Verdad Histórica” se sustenta en que los estudiantes acudieron a Iguala y boicotearon el informe de la presidente del DIF en ese municipio, lo cual es falso, por que la misión de los estudiantes era tomar camiones y su llegada a Iguala fue el momento en que ya había concluido este evento, incluso el festejo principal en la plaza de iguala ya había concluido”, indicó.
Afirma que las declaraciones de la “verdad histórica” se sustentan en declaraciones obtenidas mediante tortura a las personas detenidas, la fabricación de pruebas y la manipulación de la escena del crimen y reiterá: “Nosotros no torturamos absolutamente a nadie”.
El subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración reconoció que el nuevo informe sobre el Caso Ayotzinapa es de índole político.
“Hay un contenido político, pues esclarecer un crimen y un crimen de Estado, además de que es una responsabilidad del gobierno resolverlo, es un asunto que hemos encarado con convicción y con voluntad política para ir al fondo de los hechos”, adujo.
Señaló que para la investigación se depuraron 87 millones de registros telefónicos, los cuales fueron puestos en un mapeo de 116 números telefónicos e información de 41 mil 168 documentos aportados por la administración pública federal, órganos autónomos e, incluso, intervenciones telefónicas de la DEA.
Asimismo, se analizaron 50 videos sobre las torturas de las que fueron objeto las personas detenidas por parte de funcionarios públicos, así como 467 capturas de pantallas de 5 números telefónicos, lo que permitió ubicar 37 conversaciones entre distintos actores y 36 actores más relacionados con las mismas.
De acuerdo con el análisis de los mensajes, el funcionario señala que existió un vínculo de los sicarios con policías municipales, autoridades civiles, población civil, elementos del 27 Batallón de Infantería en el estado de Guerrero.
Encinas mencionó que la desaparición de los normalistas se definió como “crimen de Estado” porque no solamente se trata la desaparición y pérdida de vida de los estudiantes, sino también por la negativa, ocultamiento y manipulación por parte de autoridades.