Patrulla Espiritual beca a “tazo dorado” de La Paz encontrado en Tijuana (VIDEO)

A través de sus redes sociales, la Patrulla Espiritual del centro de rehabilitación Jiréh documentó el momento en que “becó” a un “tazo dorado” originario de La Paz, Baja California Sur. El joven fue hallado deambulando en condición de calle en una autopista de Tijuana, Baja California.

Este “becado”, identificado como Fabián, de 24 años, caminaba usando cubrebocas, vistiendo un short negro, sudadera deportiva y con los pies cubiertos únicamente por calcetines rotos. Detuvo su marcha cuando los miembros de la clínica se acercaron a un costado de la carretera y descendieron de su vehículo para interrogarlo.

Fabián, quien dijo ser originario de La Paz, aceptó la oferta del padrino del centro Jiréh, conocido en redes sociales como “El Chiquilín”, para ingresar voluntariamente a la clínica. Antes de llevarlo a la clínica, “El Chiquilín” lo invitó a acompañarlo a una barbería para cortarse el cabello juntos.

El joven accedió de inmediato, subiendo al vehículo y aceptando el apoyo, el cual podría representar un cambio de vida para él, ayudándolo a superar una posible situación de adicción e indigencia.

“Déjame decirte, carnal, que yo soy director de una clínica de rehabilitación cristiana. Lo único que quiero es alivianarte. Vamos a cortarnos la greñita y nos vamos a poner bien hermosos, ¡ánimo coqueto!”, motivó “El Chiquilín” a Fabián tras haber decidido unirse al centro.

En sus cuentas oficiales, la Patrulla Espiritual compartió videos del cambio radical de imagen de Fabián tras el paso por la peluquería. Estos videos se han vuelto virales, aumentando la popularidad del centro cristiano por sus métodos poco convencionales para “becar” a hombres en situaciones de vulnerabilidad social, marcados por las drogas y la indiferencia.

La Patrulla Espiritual es una organización dedicada a rehabilitar a personas que carecen de apoyo familiar y un techo seguro. Con lemas como “¡Ya parió la cochi!”, “Es increíble la capacidad que tienes para sufrir, corazón” y “¡Que se prenda la patrulla!”, este grupo ha ganado gran fama en redes sociales por la manera en que irrumpen en las vidas de quienes consideran “perdidos en su camino”, con el fin de acercarlos a las creencias cristianas y guiarlos hacia una vida más productiva y saludable.