Príncipe Harry podría ser deportado de EEUU tras una serie de cuestionamientos

Un conocido abogado de inmigración presentó una demanda que cuestiona la validez de la visa actual del príncipe Harry, lo que representa un desafío legal que podría poner en riesgo su estatus migratorio en los Estados Unidos. Esto sucede dos meses antes de su asistencia a la coronación de su padre, Carlos III.

La razón de la demanda se debe a que Harry escribió en su libro autobiográfico “Spare”, sobre su antiguo uso de drogas, algo que podría haber sido motivo para negarle la visa, según expertos legales. The Heritage Foundation, una think tank conservadora, ha exigido que se haga pública la solicitud de visa estadounidense del príncipe Harry, ya que podría ayudar a los contribuyentes a comprender si declaró su uso de drogas.

La principal preocupación de este grupo conservador es sobre si Harry fue investigado adecuadamente antes de ingresar a los Estados Unidos, ya que la política de inmigración de aquel país, tiene sanciones severas para quienes mienten a los funcionarios, que incluyen la deportación y la prohibición de solicitar la ciudadanía. Y es que, precisamente, a muchos ciudadanos británicos se les ha prohibido el ingreso por su uso indebido de drogas.

La think tank argumenta que si los funcionarios de migración sabían sobre el uso de drogas de Harry, su caso plantea dudas sobre si recibió un “trato especial”, debido a su estatus real o influyó el hecho de que su esposa, Meghan Markle, es una celebridad, por lo que insisten en que sería ilegal.

Los duques de Sussex se mudaron a su casa de Montecito en California, junto a sus dos hijos pequeños en marzo de 2020, y desde entonces, se cree que el Príncipe Harry se encuentra actualmente en los Estados Unidos con una “visa diplomática”, que generalmente está reservada para embajadores extranjeros y funcionarios gubernamentales. 

Asimismo, The Times reveló en abril de 2020 que Harry no tenía planes de obtener la ciudadanía estadounidense en el futuro cercano.

Es así que en caso de que la querella tenga éxito, el príncipe Harry podría ser deportado de Estados Unidos, además de enfrentarse a dificultades en futuro para su ingreso o salida del país.

Su decisión de alejarse de sus deberes reales y mudarse a los EE. UU. ha provocado mucho debate y controversia. Por lo que queda por ver cómo se desarrollará su vida en ese país.