Pesimismo sobre la economía desanima la confianza del consumidor mexicano

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que la confianza del consumidor en México registró un descenso en julio, ubicándose en 46.9 puntos, lo que representa una disminución de 0.4 unidades con respecto al mes anterior. Esta baja en el indicador se atribuye principalmente al pesimismo en las expectativas sobre la situación económica del país en los próximos 12 meses.

De acuerdo con los datos, todos los componentes del Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) cayeron en el séptimo mes del año, siendo el referente a la situación económica esperada del país el que mostró el mayor retroceso, con una disminución de 0.7 puntos. Este descenso rompe con dos meses consecutivos de avances, indicando un deterioro en las expectativas de los consumidores sobre el futuro económico.

Además, la situación económica esperada de los hogares dentro de un año, comparada con la actual, también reflejó una caída de 0.4 puntos, mientras que la percepción de la situación económica actual de los hogares frente a hace 12 meses disminuyó 0.3 puntos. Esto sugiere que los consumidores ven con menos optimismo la evolución económica tanto a nivel nacional como en sus propios hogares.

El Inegi también destacó que la capacidad de los hogares para realizar compras de bienes durables, como muebles o electrodomésticos, se redujo por tercer mes consecutivo, con un descenso de 0.3 puntos. Este comportamiento está ligado al repunte de la inflación en productos agrícolas, energéticos y servicios, lo que ha afectado el poder adquisitivo de las familias.

A pesar de esta disminución mensual, la confianza del consumidor muestra un incremento de 0.6 puntos en comparación con julio de 2023, lo que indica un optimismo moderado. Sin embargo, la ralentización del crecimiento económico y la reciente pérdida de más de 800 mil empleos en el mes de julio, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), han moderado las expectativas de los consumidores.

En términos anuales, la situación económica actual de los hogares avanzó 0.4 puntos en comparación con julio de 2023, mientras que la expectativa sobre la situación futura del país mostró un incremento de 1.4 puntos. Aun así, la posibilidad de realizar compras de bienes durables presentó un retroceso anual de 0.4 unidades, lo que sugiere que los consumidores siguen siendo cautelosos en sus decisiones de gasto.

Estos resultados reflejan que, aunque la confianza del consumidor en México se mantiene en niveles de optimismo, la incertidumbre económica sigue siendo un factor que frena el entusiasmo de los mexicanos sobre el futuro.