PGJE confirma suicidio de Johana Marlene en Comondú

0
850
Daniel de la Rosa Anaya, procurador de Justicia de Baja California Sur

El titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Baja California Sur, Daniel de la Rosa Anaya, confirmó que la muerte de la joven Johana Marlene se trató de una acción suicida.

La estudiante de 23 años se disparó con un arma corta en la zona craneal para quedar malherida y ser declarada como fallecida cuando era atendida en un hospital de Ciudad Constitución del municipio de Comondú.

Los hechos registrados la tarde del 1 de abril conmovieron a toda la sociedad comundeña tras darse a conocer que la chica atentó contra su vida en un domicilio de la colonia Hacienda en la cabecera municipal. 

“En cuanto a los hechos acontecidos en Comondú, es importante destacar que hasta el momento toda la investigación arroja que se trata de un suicidio. La persona tenia una pistola calibre 38 con la que se disparó. Todas las pruebas periciales resultan positivas, no tenía ninguna huella de violencia distinta al hecho de la lesión por arma de fuego en la cabeza”.

La muerte de Johana tomó por sorpresa a sus familiares y amigos, quienes en redes sociales expresaron que la chica era muy independiente y llena de vida, con deseos de tramitar su pasaporte para viajar y conocer otros países. El día que murió tenía planeado asistir a una despedida de soltera y posteriormente organizar sus vacaciones de Semana Santa; sin embargo, todo cambió.

De acuerdo con los detalles incluidos en la carpeta de investigación: CST/284/2023, la mujer fue trasladada en ambulancia a la sala de urgencias de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) luego de haberse disparado. Allí ingresó con un traumatismo craneoencefálico severo por proyectil de arma de fuego con orificio de entrada y salida.

Pese a que fue atendida por el personal médico, la herida en su cabeza provocó su deceso en el hospital. La autopista determinó que la causa de muerte había sido por suicidio, ya que según los resultados del microscopio electrónico de barrido se encontraron residuos de pólvora en las manos de la occisa.

Así como sus huellas dactilares en la pistola que utilizó, la cual fue encontrada sobre el colchón de la cama donde se disparó para quedar malherida y recostada de lado en un buró de la recámara. No obstante, Johana no se encontraba en su casa en el momento de la acción, sino en el hogar de su pareja sentimental, un doctor jubilado de 65 años identificado como Jesús Camarillo.

Ya entrados en confianza en la relación, la joven tenía copias de las llaves de la casa del médico, quien se encontraba realizando una cirugía en un hospital privado cuando ocurrió el suicidio. Al regresar a su vivienda encontró a Johana herida de muerte en su cuarto. Después de llamar al 911 las unidades paramédicas que atendieron la emergencia intentaron reanimar a la joven, pero fue imposible.

“Las pruebas periciales salieron positivas a la víctima, en el manejo del arma. Esta tambien estuvo en contacto con su cabeza, de lo que se desprende que la agresión fue autoinfligida”.

Durante las investigaciones del caso, las autoridades de la PGJE interrogaron a los seres queridos de Johana para conocer que la joven ya había intentado suicidarse en otra ocasión, tomándose varias pastillas para dejar de existir, luego de sufrir por episodios de depresión y los cuales la obligaban a tomar tratamientos controlados de por vida.

“Hay unas entrevistas donde se precisa que la joven mujer ya había intentado privarse de la vida anteriormente. Ahí hay entrevistas ya con familiares de la víctima e indican que tomaba un medicamento controlado antidepresivo”.

Pese a que un sector de la sociedad comundeña recriminó a las autoridades que la muerte de Johana mostraba inconsistencias y que pudiera tratarse de un feminicidio, la PGJE confirmó que los exámenes forenses realizados al cuerpo y al arma el fuego, así como las evidencias recabadas en el lugar donde ocurrió el hecho, llevaron a que se cambiara el proceso de indagatorias y presentación de pruebas como un caso de suicidio.

“Este caso se está investigando con protocolo de feminicidio; sin embargo, todo lo que ya se ha actuado en la investigación arroja como resultado hasta el momento que se trata de un suicidio”.

Asimismo, la pareja sentimental de Johana Marlene fue liberada de todo cargo en su contra luego de las investigaciones realizadas en su domicilio, una etapa de interrogaciones y después de que el galeno le comprobó a las autoridades penales que se encontraba en una sala de quirófano cuando Johana activó el gatillo de la pistola para provocarse una herida mortal de la cual no alcanzó a sobrevivir.

Imberth Rondero