Polonia recibirá al Papa Francisco, con debate sobre su estilo
Ciudad del Vaticano, 26 Jul (Notimex).- En su visita apostólica a Polonia, que inicia mañana miércoles, Francisco encontrará una multitud de jóvenes entusiastas pero también un grupo de obispos que aún no logran sintonizar con su estilo y lo comparan sistemáticamente con Juan Pablo II.
El decimoquinto viaje internacional del presente pontificado se concentrará en Cracovia y sus alrededores, con actos multitudinarios relacionados a la Jornada Mundial de la Juventud que el Papa cerrará el domingo 31 de julio con una misa en la que se espera la asistencia de más de un millón y medio de personas.
Además Jorge Mario Bergoglio protagonizará otros momentos de gran significado como la visita al campo de concentración nazi de Auschwitz, la mañana del viernes 29.
Pero el principal desafío del líder católico será afrontar a los obispos polacos, muchos de los cuales han demostrado –privada y públicamente- resistencias a su estilo de gobierno de la Iglesia.
Por ejemplo, en octubre de 2005 durante la cumbre de obispos (Sínodo) que debatió temas candentes sobre el matrimonio y la familia, la delegación polaca se mostró abiertamente crítica al rumbo marcado por el pontífice.
Incluso en esa ocasión la comitiva que representaba a la Conferencia Episcopal de Polonia publicó en internet las transcripciones de los discursos ante el pleno pronunciados por algunos obispos y cardenales, contraviniendo abiertamente la voluntad del Papa.
Algunos obispos han reconocido, aunque tangencialmente, esta distancia con Francisco como el cardenal Kazimierz Nycz, arzobispo de Varsovia, quien en una reciente entrevista aseguró que el mensaje del pontífice latinoamericano es recibido más favorablemente por los laicos que por el clero católico.
La situación de los migrantes en Europa se convirtió en un espacio de disputa, ya que el gobierno polaco optó por seguir una política de cierre de las fronteras y a nivel público esta línea pareció contar con el apoyo de algunos exponentes de la Iglesia católica.
Pero el Papa mantiene una postura completamente contraria. Para evitar equívocos, el Vaticano publicó en los últimos días una peculiar nota de prensa en la cual se enlistó una serie de pronunciamientos de los obispos polacos en el mismo sentido de Francisco.
La publicación fue un mensaje en si mismo, ya que la sala de prensa de la Santa Sede no tiene por política difundir comunicaciones de las Iglesias de los diversos países. La excepción demostró un intento por sanar una distancia pública creada.
Por todos estos motivos resulta significativa la reunión que sostendrá el Papa con todos los obispos polacos, la tarde-noche del primer día de su visita al país, este miércoles 27 en la catedral de Wawel en Cracovia.
Originalmente el Vaticano había anunciado que la reunión iba a ser pública y con un discurso preparado con anterioridad por Francisco, pero a último momento se cambió el formato por un encuentro privado en forma de diálogo.
Una conversación que podrá distender ánimos, con posibilidad de poner paños fríos a una “brecha” que ya es reconocida públicamente dentro de la misma Iglesia.
Así lo destacó desde Polonia, Raymond de Souza, sacerdote canadiense editor de la revista Convivium, en un artículo publicado por el diario británico Catholic Herald.
“Cuando el Papa Francisco llegue aquí para la Jornada Mundial de la Juventud, ¿Vendrá como su predecesor, Benedicto XVI, para honrar a Juan Pablo II, quien a su vez honró a Pablo VI?”, escribió.
“Si no lo hace, profundizara más la brecha con los católicos que son devotos del santo Papa polaco. Que hay una brecha está fuera de discusión”, añadió.