El rezago educativo que dejó la pandemia el reto de los profesores
La nueva normalidad derivada de la pandemia por Covid-19, sin duda dejó en claro que el maestro no lo sabe todo y ello los obligó no solo a aprender a lidiar con las nuevas tecnologías, sino también a redefinir sus métodos de enseñanza, así lo compartió en entrevista para CPS Noticias, Leonardo Martínez Pérez, docente de historia de profesión, esto en el marco del Día del Maestro que se conmemora este 15 de mayo.
“Ahí ves al ser humano que, pues también tenía problemas, que también tenía ansiedad por saber cuándo regresar, si los chicos estaban aprendiendo, entonces yo como les dije a mis alumnos en algún momento, este ciclo de la pandemia lo construimos todos, si algo no funcionaban pues tenían que decirnos, nos estamos aburriendo, no estamos aprendiendo, pues uno tenía que adecuarse a ello; obviamente también el miedo del profesor de decir, no, no puedo cambiar nada y así doy mis clases y voy a comprar mi pizarrón y voy a hacer como si estuviera en el salón, también era válido, ahí vez el miedo quizás de algunos compañeros porque así aprendieron a enseñar y así se van a morir enseñando”, manifestó.
Martínez Pérez, mencionó que si bien, la pandemia parece que empieza a quedar atrás, el mayor reto para los docentes apenas empieza, y es el rezago.
“Creo que apenas va a empezar lo bueno, porque podremos ponernos en la cuestión bonita de la pandemia, que todos aprendieron, todos estuvieron al son de la educación, pero la realidad es que no, va a ver un desfase tremendo en educación”, afirmó.
Señaló que las afectaciones de la pandemia son más notorias en los estudiantes que migraron de nivel educativo, es decir de 6to de primaria a secundaria, secundaria a prepa y también universidad, en donde sin duda sobrevivió el más apto.
“Y más apto pues hablamos social, económica, incluso emocionalmente, que tuvieron que sobreponerse a ello, entonces creo que apenas va a empezar ese rezago, quizás nos cueste unas 3 o 4 generaciones volver a estar donde estábamos, si es que estábamos en un lugar bueno o aceptable”, recalcó.
Leonardo Martínez expresó que para las escuelas que tenían un nivel aceptable de interacción o comunicación con su alumnado durante la impartición de clases a distancia quizás, el periodo de recuperación sea menor, pero incluso en esas escuelas, el rezago emocional, el estrés, la ansiedad, existe.
Enfatizó que, en esta nueva normalidad, a los docentes les depara ser muy empáticos, y entender que los docentes no lo saben todo, que son más una guía por lo que los procesos y modelos educativos tienen que cambiar.
Para concluir, el profesor señaló que en lo personal, la mayor enseñanza de la pandemia es que los cambios están a la vuelta de la esquina y que si bien se llevó seres amados, los que se quedaron tienen la responsabilidad de seguir aportando y construyendo el mundo y sin duda, los maestros continuarán siendo un mediador entre los padres de familia y un intermediario entre el alumno y toda la información que se genera en redes.