David “El Peregrino” llegará el sábado a La Paz con la imagen de la Virgen
A través de un video compartido en sus redes sociales, el peregrino de la virgen, David González, anunció su llegada a la ciudad de La Paz para cumplir su manda prometida a la Virgen de Guadalupe.
El viajero originario de la comunidad de Isla Aguada en el estado de Campeche declaró que saldrá del poblado de Las Pocitas con destino a la capital de Baja California Sur para dirigirse al santuario de Guadalupe y cumplir con su promesa.
“Para las personas que están pendientes del recorrido que estamos haciendo de nuestra manada Les informo que no vamos a llegar hoy, vamos a tratar de descansar un poco ya cerca de La Paz. He estado viendo que están subiendo información de que yo llego, honestamente deben tener un poquito de consideración porque vengo pedaleando desde muy lejos. Si puedo llegar hoy, pero la verdad no voy a llegar en la mera noche.”
El peregrino hizo cambios de planes con el deseo de descansar y reponerse físicamente de la larga travesía que comenzó el pasado mes de mayo en su tierra natal. Pernoctará en Las Pocitas, ubicado en el kilómetro 112 del tramo carretero Ciudad Constitución-La Paz, para retomar su recorrido y llegar a su meta.
“Si llego en la noche nada más llegaría a cumplir, a dejar la virgen en el santuario y me quitaría enseguida. Analizando las cosas sé que mucha gente va a estar ahí, entonces decidimos que vamos a llegar el sábado 26 de agosto como a las 11 o 12 del día, es un aproximado que tenemos en mente porque se que mucha gente me va a pedir foto, me va a pedir entrevista y todo eso, y no quiero por esa parte ser grosero de no dárselas.”
De acuerdo con sus propias palabras, la llegada del peregrino está programada para el mediodía del sábado, arribando con dirección norte de la carretera transpeninsular donde se ubica la escultura de la Cola de La Ballena. Según el aventurero que carga con la imagen de la guadalupana sujetada detrás de su bicicleta, colocará la escultura de la figura religiosa en el templo católico como señal de evidencia de su insólita travesía, tal y como se lo prometió a la virgen.