Sector Abarrotero afectado por pandemia e inflación de costos
Pese que el año inició bien, la realidad para el sector abarrotero hoy en día es distinta ante el incremento de inflación que ha fluctuado en gran manera durante los últimos meses, así lo señaló Armando de la Cruz Navarrete, vicepresidente de Canaco Servytur Los Cabos y representante del Sector Abarrotero.
Señaló que de enero a marzo las ventas iban muy bien, solo hubo un incremento fuerte del 10% tanto en la tortilla como en la harina para el pan.
“Después de la pandemia, de marzo a junio nos perjudico en todo, la restricción de horarios de operación, la suspensión de bebidas alcohólicas, así como la escasez de algunos productos de traslado ya que los proveedores de frutas, verduras, legumbres y semillas no completaban el viaje del interior hacia Los Cabos, por lo que tenían que esperar hasta 15 días o un mes”, afirmó.
Hecho que explicó, incrementó los costos hasta en un 30% y en muchas ocasiones hubo desabasto en productos de la canasta básica, estos en los meses de aislamiento social.
Para el mes de junio y tras el arranque de actividades las mejoras fueron en aumento entre un 10 y 15% pero a principios de noviembre se les notificó que el blanquillo estará en aumento entre un 5-10% por semana esto por la temporada invernal pues la producción reduce por la misma temperaturas y las granjas avícolas se encuentras en Obregón Sonora.
Manifestó que actualmente este producto ronda por cartera entre $64 y $70 pesos pero para finales de diciembre podría estar alcanzando los $100 por cartera esto ante la importación de la materia desde los Estados Unidos ante la baja de producto nacional, lo que si será de gran impacto en la economía
Declaró que desde el inicio de la pandemia, a la fecha han cerrado muchos negocios y no solo de abarrotes, pero solo de su sector han sido alrededor de 10 ante los costos tan altos de las rentas en contraste con las bajas ventas.
Expuso que ellos como una sección afiliada a la Cámara de Comercio implementaron ciertas estrategias para salir adelante en los tiempos más difíciles por lo que en primera instancia optaron por la reducción de plantillas de personal hasta en un 50% liquidando al resto, adicional a ello muchos abarroteros redujeron el uso de aparatos de enfriamiento a fin de reducir costos por consumo de energía.
Mencionó que la mayoría son empresas familiares y las que están aguantando la crisis por la pandemia mismas que se esfuerzan por cumplir con todos los protocolos que marca sanidad a fin de evitar alzas de contagios, factores que cuidan pero que en muchas ocasiones les hace perder clientes pues muchos no quieren usar un cubrebocas para entrar por lo que se van a donde no se los piden.
Finalmente destacó que adicional al maíz, la harina y el huevo con un incremento notable a partir del 1 de diciembre, no se espera alza de más productos a menos que haya el conocido gasolinazo y en tanto al incremento de la canasta básica tampoco es oficial aún ni para finales de año ni para el inicio del próximo.
“Esperemos con el favor de Dios no pase nada de esto, por que quien paga todo esto al final es el cliente-consumidor, las familias que viven en una casa de 5- 6 ó más y el sueldo no les favorece, entonces es donde les golpearía más fuerte pues viven al día”, puntualizó.