Turistas se ponen muy agresivos al no poder entrar a playa Balandra
Gritos e insultos es lo que reciben diariamente quienes se encuentran en el acceso a playa Balandra, así lo manifestó Alberto Guillen, director operativo de la Red de Observadores Ciudadanos (ROC), quien mencionó que las actitudes agresivas por parte de los visitantes que no logran acceder al área cada vez son más comunes y en mayor medida llegando casi hasta a los golpes.
“Han llegado a las agresiones verbales muy fuertes, de hombres a las chicas que hacen la vigilancia dentro del área, totalmente irrespetuosos, sin ningún sentido de nada. Insultan a las encargadas de turno y a veces se bajan de los carros también mujeres súper agresivas”, expuso.
Los factores que más se repiten en estos casos es frustración y desinformación; la primera, por la emoción que tenían de conocer un sitio tan publicitado a nivel nacional e internacional, mientras que la segunda se debe a que los turistas e incluso habitantes de la localidad de La Paz desconocen que Balandra es un Área Natural Protegida (ANP) y las medidas de protección que esto implica.
Alberto Guillén sostuvo que la gente explota y empiezan a cuestionar de una forma agresiva; “¿tú quién eres?“, “no eres autoridad“, “las playas de México son libres”, son algunos de los argumentos que escuchan a diario, los cuales no son suficientes en un área natural protegida.
Al día ingresan 800 personas a la playa, y aunque no hay una cifra de cuántos son los que se quedan afuera, existe un estimado de 400 a 600 vehículos los que no entran y que además llevan en su interior, parejas, jóvenes viajeros, familias enteras y tours con muchas personas.
“Se bajan dos, tres, cuatro personas con la intención hasta de golpearlo, obviamente esto disminuye cuando hay presencia de la autoridad como la policía, pero ellos tampoco están todo el tiempo, en lo que entra su turno o en lo que hacen cambio de guardia hay espacios, pero obviamente que cuando están ellos salen a dialogar con los usuarios y les vuelven a explicar; a ellos también les han toca insultos”, reiteró.
Los horarios más complicados en los que no dejan de llegar personas son de 9 a 11 de la mañana y de 4 a 7 de tarde. Además, las personas que suelen ponerse agresivas y lanzan amenazas, provienen de otros estados del país, mientras que los extranjeros se retiran con una actitud más tranquila.