Un servicio que se niega a morir el correo postal y sus carteros

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Cabo San Lucas.- Aún no pasa desapercibido el festejo del Día del Cartero, todo el staff salen a recorrer las calles de Cabo San Lucas, entregando algunas esporádicas cartas y mucha papelería de empresas que utilizan una de las comunicaciones más antiguas.

Para José, originario de Tepic, Nayarit pero criado en El Valle en Ciudad Constitución, es uno de los carteros que se encuentran en la sucursal de la colonia Arco Iris  y con mucho orgullo dice, “Llegué hace veintitrés años a Cabo San Lucas, empecé trabajando en la oficina de correos  del centro, prefiero recorrer la ruta en bicicleta pues la siento más segura que la moto’’.

José Guadalupe Franco Hernández se siente contento por tener un trabajo que es diferente, que va conociendo gente y que desde hace veintitrés años ha pasado las calles, primero de arena y ahora ya pavimentadas, con su  amiga fiel que es la bicicleta, “La verdad es un gusto poder hacer esta labor, la ruta donde  reparto  es  el centro, la colonia Arenal y Lomas del Sol con la bicicleta’’.

El Servicio Postal Mexicano se niega a morir a pesar de la tecnología, sigue ofreciendo la atención a la comunidad, y José agrega, “Ya no es como antes. Hace más de veinte años no había teléfono celular, ni nada de las redes sociales y había mucho más trabajo, sobre todo cartas, ahora nos llega mucha paquetería del banco, teléfono, ahorita por ejemplo estamos repartiendo los recibos de luz, esto de lunes a sábado, aunque los sábados salimos a las doce”.

José Guadalupe añade, “El festejo grande del Día del Cartero o Servidor Postal fue en La Paz, no pudimos ir pero nosotros hicimos una comidita entre todos los compañeros, además de que no trabajamos aquí en la sucursal de la colonia Arco Iris que tenemos como once años de estar en esta oficina’’.

“Entre la palomilla celebramos este día, ya veremos también en donde habremos de cenar por la noche, pero puedo decir que la gente antes se portaba bien con nosotros, ahora…. también a veces nos dan una propinita o cualquier detalle es bueno, todo se agradece porque sabemos que lo dan con buena intención’’.

Una situación que recuerda José Guadalupe, “Cuando recién llegué a Cabo San Lucas, luego de presentar mi examen en La Paz, es que me tocó hacer una ruta y entregar una carta a una señora, que feliz agradeció que se la llevara, era tanta su alegría porque estaba en espera de las noticias que le enviaban en esa carta, eso no se me olvida porque esa ocasión fui portador de algo bueno para ella”.

“Lo más recurrente para entregar en estos días son estados de cuenta, o de publicidad que se debe entregar. pero ya son muy pocas las cartas que se llevan a los domicilios, ahora con tanta tecnología es más rápido; pero también agradezco que hace años, Marcos fue el que me enseñó que había trabajo aquí y él me llevó a hacer la ruta, esas cosas se agradecen”.

Sin importar las inclemencias del tiempo, de los días intensos de sol o las veces que raramente amanece con lluvia, ellos, los carteros, son el enlace de información, han sido portadores hace décadas de llevar alegrías y hasta malas noticias, pero siempre son forjadores de una área de comunicación que se niega a morir.