Voluntarios de Los Cabos se preparan para proteger los nidos de tortugas marinas
El pasado viernes, el operativo de la red de protección de tortugas marinas llevó a cabo una clase práctica para un grupo de voluntarios con el objetivo de concientizar y capacitar en la detección y recolección de nidos de tortugas.
Actualmente, en Los Cabos ha comenzado la temporada alta de anidación, y en el corral de anidación ubicado en la playa junto al estero de San José del Cabo, se han protegido aproximadamente 35 nidos. Por esta razón, los voluntarios del programa de protección a la tortuga marina han recibido capacitación tanto práctica como teórica.
Durante la clase práctica, el biólogo marino Gabriel Olvera y el encargado del corral de anidación, el Profesor Joel, realizaron una simulación de un nido de tortuga para que los voluntarios pudieran aprender los pasos adecuados para identificar, recolectar y reubicar los nidos. Según el biólogo Gabriel Olvera, esta actividad tiene como objetivo sensibilizar y fortalecer la integración del grupo.
Durante las explicaciones por parte de los especialistas en tortugas marinas, se brindó información relacionada con la anidación y el desove de las tortugas. En el caso de una hembra que aún no ha desovado, se espera a que inicie el desove y se recolectan directamente sus huevos en bolsas de plástico.
Si la hembra ya ha desovado, se busca en el área de la cama el sitio donde fueron depositados los huevos. Con la ayuda de una vara o bastón delgado, se ingresa aproximadamente 15 centímetros en la arena para sentir el área de anidación. Los nidos de tortuga se encuentran en una zona blanda de la arena, por lo que la vara se introduce suavemente. Una vez localizado el punto, se comienza la excavación cuidadosamente utilizando las manos a modo de cucharita. Una vez superados los 45 centímetros de profundidad, es posible visualizar los primeros huevos de tortuga. Estos se recogen en una bolsa de plástico y se llevan al corral de incubación para ser “sembrados”.
Es importante tener en cuenta que un nido de tortuga puede contener hasta 160 huevos, con un promedio de alrededor de 105. Por lo tanto, la recolección y el conteo preciso de los huevos son de suma importancia. Una vez recolectados y contados, se anotan los datos en la bolsa y se comparte la ubicación por coordenadas del sitio de extracción.
La manipulación de los huevos debe realizarse siempre con guantes y con cuidado para preservar la integridad de los mismos. Al sembrar los huevos en el corral de anidación, se registra el número de nido, la fecha de recolección, el número de huevos y la fecha aproximada de eclosión. Según los datos, el proceso de eclosión se estima entre 45 y 51 días, dependiendo de la temperatura de la arena. De acuerdo con el biólogo Gabriel Olvera, solo el personal voluntario está autorizado para recolectar los huevos de tortuga. Si la ciudadanía o los bañistas encuentran un nido de tortuga, es importante informar a las autoridades correspondientes.
Para aquellos interesados en formar parte del equipo de voluntarios o que deseen obtener más información sobre la protección de las tortugas marinas, pueden acercarse al corral de anidación ubicado en la playa, junto a la Reserva Ecológica Municipal Estero de San José del Cabo.