La Alberca Olímpica busca formar un patronato para abrir al público en seis meses
Han transcurrido casi ocho años desde que el exalcalde Arturo de la Rosa gestionó una inversión cercana a los 60 millones de pesos para la construcción de la alberca olímpica en la Unidad Deportiva Don Koll. Esta inversión fue parte de una donación realizada por el desarrollador Chileno Bay.
Aunque la alberca fue inaugurada a finales de 2024, la síndica municipal, Nélida Dolores Martina Alfaro Rosas, informó que el espacio deportivo no será abierto al público hasta dentro de seis meses. La razón de este retraso es la creación de un patronato o la obtención de financiamiento externo que permita asegurar los recursos necesarios para su mantenimiento. Mientras tanto, el inmueble continuará bajo la administración del desarrollador.
“Realizamos un convenio con la empresa Chileno Bay para que se encargue del mantenimiento de la alberca durante seis meses. Durante este tiempo, estableceremos mesas de trabajo para evaluar la formación de un patronato o explorar opciones de financiamiento externo, como becas para niños y jóvenes que deseen practicar este deporte”.
La síndica municipal destacó que el costo de operación de la alberca olímpica es elevado, por lo que será necesario implementar una cuota que ayude a cubrir los gastos y asegurar su correcta operación.
“Esto no ocurrirá de un día para otro. El proceso llevará tiempo, ya que el mantenimiento representa un costo significativo”. Todo conlleva un costo, y para garantizar la responsabilidad y el adecuado cuidado del inmueble, será necesario contar con una participación económica. El cobro no será elevado, se tratará de una cuota accesible que nos permitirá contribuir al mantenimiento”.
Las autoridades municipales estiman que la operación mensual de la alberca olímpica tendrá un costo de aproximadamente 300 mil pesos. Por ello, la tesorería municipal y el Instituto del Deporte de Los Cabos trabajan de la mano para convertir este espacio en un semillero de talento deportivo y evitar que se perciba como un gasto, si no como una inversión para el futuro de la región.