Denuncian fiestas y fogatas en Isla Espíritu Santo
En una denuncia compartida en redes sociales, un prestador de servicios turísticos señaló que tripulantes de yates realizan fiestas y fogatas en Isla Espíritu Santo, poniendo en riesgo el ecosistema frágil de la región. Las imágenes de la publicación corresponden a un evento celebrado el 19 de abril en playa Bonanza.
“Las fiestas de los yates en Isla Espíritu Santo fuera de control. Qué suave ser millonario y que no te apliquen ninguna regla en el parque. Este yate hizo un rave grande con todo y fogatón para que bailen con todo”, escribió el denunciante.
Al respecto, Alberto Guillén Guadarrama, director operativo de la Red de Observadores Ciudadanos (ROC) en La Paz, destacó la importancia de cumplir con los permisos requeridos para ingresar a áreas protegidas como Isla Espíritu Santo. Según Guillén, cualquier embarcación privada debe obtener los permisos correspondientes de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y notificar sus intenciones de visita.
“Todos los visitantes de fuera que no vivan en La Paz tienen que adquirir sus brazaletes, así sean barcos, yates, veleros, embarcaciones particulares, las embarcaciones que llevan gente a través de una embarcación de prestador servicios turísticos lo hacen a través de ellos de los prestadores. Están obligados a comprar los brazaletes y entregárselos a sus clientes”.
Además, señaló que el Plan de Manejo de las Áreas Naturales Protegidas establece claramente la prohibición de realizar fogatas en la arena en Isla Espíritu Santo.
“En el Plan de Manejo de las Áreas Naturales Protegidas ahí están las reglas sobre lo que se puede y lo que no se puede hacer en muchas de las playas. En Espíritu Santo tenemos tres zonas núcleo que es la Barra de Bonanza, que abarca un pedacito de una playa, la bahía de San Gabriel que es toda la bahía y toda su playa y la zona de La Lobera”.
Guillén instó a los ciudadanos a reportar cualquier violación a las autoridades competentes para garantizar la conservación de los recursos naturales y el cumplimiento de las normativas ambientales. También destacó la necesidad de que los visitantes se informen adecuadamente sobre las regulaciones del área antes de realizar actividades recreativas.
LLM