“Temo por mi vida” madre de familia amenazada de muerte y violación no obtiene justicia

Siete meses después de ser presuntamente amenazada de muerte y de violación, Mariana Curiel no ha obtenido justicia en su caso. En enero de 2023, la madre de familia radicada en la comunidad de San Pedro, Baja California Sur, se mudó a su nuevo hogar tras adquirir un terreno donde construyó una vivienda para vivir al lado de su esposo e hijos.

Sin embargo, el antiguo dueño del predio identificado como Manuel Salvador, quien es un conocido constructor del municipio de La Paz, le insistió en varias ocasiones que también le comprara el terreno aledaño a su hogar, o de lo contrario, construiría una palapa que pondría en renta para la celebración de eventos durante los fines de semana. 

Después de recibir una negativa por parte de Mariana, el sujeto comenzó a acosarla al grado de ordenar dañar sus vehículos y amenazarla de muerte, además de decirle en una ocasión que la violaría junto a 14 de sus trabajadores que acudían a hacer labores de limpieza a una obra negra, por haberse negado a comprarle el segundo espacio de construcción que no entraba en la negociación del proceso de compra-venta.

 A través de cámaras de circuito cerrado colocadas en el domicilio de Mariana, quedó captado como la madrugada del pasado 19 de mayo un grupo de hombres se plantó afuera de la vivienda para romperles los cristales y poncharles las llantas a la camioneta particular y al vehículo de trabajo de la afectada, además de arrancar las cámaras de seguridad del domicilio.

Según las declaraciones de la víctima, los delincuentes fueron contratados por el constructor para amedrentar aún más por no haber accedido a sus exigencias. Temiendo por su integridad y la de su familia, Mariana acudió a instancias penales a interponer varias denuncias por los hechos, las cuales fueron recibidas con los números de folios: 3374/2023 /NUC , 3312/2023/NUC y 2251/2023/NUC/2023 en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

Mariana Curiel, afirmó que las carpetas siguen en fase de recolección de evidencias y valoración de pruebas y no ha podido obtener resultados a su favor. Sin embargo, espera que con la presentación de los videos grabados por las cámaras e imágenes de su grupo de agresores a las autoridades, se pueda agilizar su proceso legal. 

“Temo por mi vida, pero ante la respuesta que me dio el órgano interno de control de la procuraduría se presentó una queja ante la comisión estatal de derechos humanos, ya ellos tienen los videos y tienen la evidencia. Pero en sí, no han avanzado mis procesos, aparentemente ya están por judicializarse, solo estoy esperando las fechas de las audiencias y en espera de encontrar justicia pronto.”

La madre de familia no se siente segura ni en su propia casa, ya que teme que los sujetos que ya fueron una vez a su domicilio a quebrar los cristales a sus autos y dañar las cámaras de vigilancia, regresen para intentar un acto delictivo con mayores consecuencias. Mariana, sigue esperando que las instancias de justicia hagan algo para protegerla y para detener a su agresor, quien, según ella, sigue planeando cómo y de qué manera seguir haciéndole daño a manera de venganza.