Vecinos de Altamira Residencial piden más áreas verdes

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Hace cuatro años, la señora María Covarrubias adquirió una vivienda en la colonia Altamira Residencial. Al igual que otros de sus vecinos se sintió atraída por las promesas que le hizo la compañía que le vendió la casa. 

Entre las cosas que llamaron su atención se encontraban las áreas verdes. Además del parque principal de la colonia, les indicaron que otros terrenos también serían convertidos en espacios de recreación comunitarios, uno de ellos se encontraba justo frente a su casa. 

El terreno, sin embargo, nunca fue convertido en un parque. Por el contrario, dos años después fue cercado y se le colocó un letrero que lo cataloga como propiedad privada.

“Desde que llegamos a aquí nos dijeron que el terreno que está enfrente de mi casa era para área verde; iban a poner juegos y todo eso. Un vecino de aquí mismo llenó de árboles, de vegetación. Estuvo cuidándolos y todo. De repente vinieron los de la empresa y empezaron a quitar árbol y vegetación y pusieron la malla”, explicó.

Por su parte, el parque principal no recibe ningún tipo de mantenimiento por parte de la compañía constructora. Los juegos se encuentran deteriorados y la limpieza es realizada por los colonos. 

Para los vecinos, la colonia ha sido una decepción, pues no han obtenido lo que les prometieron. La señora María mencionó que los materiales que se utilizaron para construir las casas no son de calidad.

“Han salido casas que están hechas con puro plafón. Tenemos problemas en la calle. Hay alcantarillas que están a punto de colapsar, las tapaderas están a punto de hundirse”, ahondó.

Cuando recién se mudaron, los servicios públicos eran deficientes. Durante tres años, el agua potable llegó con muy poca presión. La mayoría de los habitantes tuvo que instalar cisternas en sus domicilios. Aunque el servicio de agua potable se ha regularizado, el de recolección de basura en ocasiones aún presenta algunas fallas.

Andrea Villarreal