Séptimo detenido por presunto asesinato del empresario Íñigo Arenas
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó sobre la detención de Manuel Alejandro “N” por su supuesta implicación en la muerte del empresario Íñigo Arenas Sainz.
Este individuo es el séptimo sospechoso relacionado con el fallecimiento del empresario. Trabajaba como mesero en el bar “Black Royce” en Naucalpan y atendió a Arena Sainz cuando llegó al local poco después de las 3:00 horas del 6 de agosto pasado.
La dependencia mexiquense anunció la nueva detención el viernes 18 de agosto. Según las autoridades, Manuel Alejandro “N” es mesero en el club Black Royce, el lugar donde ocurrieron los hechos y donde se encontró el cuerpo de Arena Sainz.
La detención tuvo lugar el 17 de agosto en la colonia El Corralito, municipio de Naucalpan, como resultado de una operación realizada por agentes de la Policía de Investigación de la FGJEM.
“Con base en las pruebas obtenidas durante las investigaciones, la Autoridad Judicial emitió una orden de aprehensión contra siete posibles involucrados, la cual se ejecutó con la detención de Manuel Alejandro ‘N'”.
En la madrugada del domingo, junto con Eduardo “N”, capitán de los meseros, y cuatro mujeres detenidas, convenció a Arenas Saiz de ir al área “VIP” en la planta alta del establecimiento, donde finalmente perdió la vida, a pesar de su estado inconveniente.
En el caso de la muerte de Íñigo Arenas, se había logrado la vinculación a proceso de seis personas
Vale la pena mencionar que los primeros seis detenidos en este caso, Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N” (empleadas del establecimiento), Eduardo “N” (capitán de meseros) y Carlos “N” (agente de seguridad), fueron vinculados a proceso el 16 de agosto por el delito de homicidio.
De acuerdo con los resultados de los exámenes periciales, Iñigo Arenas murió debido a asfixia mecánica por sofocación inducida, presuntamente causada por diversas drogas que los empleados de Black Royce habrían puesto en su bebida.
A pesar de que los detenidos afirmaron que pidieron ayuda a los paramédicos, la fiscalía señaló que hasta el momento no hay evidencia de que los imputados hayan alertado oportunamente a los servicios de emergencia.