Ciudadanos solicitan señalamientos viales en la calle Melchor Ocampo
El cruce de la calle Melchor Ocampo con bulevar Margarita Maza de Juárez, avenida El Triunfo y Arroyo El Cajoncito es considerado un sitio peligroso por peatones y automovilistas. En dicha intersección solamente se observa un letrero de alto, el cual, según mencionaron los vecinos, en muchas ocasiones no es respetado.
“Sí está muy peligroso. Sí ha habido mucho choque ahí. Se dejan ir los carros de repente. Tanto de aquí para allá como de allá para acá no respetan, o hay veces que no marcan para dar vuelta para acá la gente. Se deja ir […] Está peligroso porque, por ejemplo, van cruzando y la gente sube, y sube recio”, comentó Armando.
En el caso de los transeúntes, estos no cuentan con cruces seguros. En la zona del bordo ni siquiera existe banqueta, por lo que las personas deben caminar por el arroyo vehicular.
“Yo creo que sería muy buena idea poner un alto o un cruce para los peatones porque tenemos que ir corriendo y eso es un poco peligroso”, manifestó Gabriela, quien caminaba por la cuadra con su perro.
Jesús, otro de los entrevistados, hizo un llamado a las autoridades para que hagan una intervención integral del crucero.
“Que pongan cartas en el asunto porque sí se requiere, más en la noche que no hay mucho alumbrado público. Las luces nomás aprenden cuando hay fútbol y mientras pues no hay alumbrado público. Si se pueden dar cuenta, no hay”, mencionó.
Por su parte, Carlos, comerciante de la zona, señaló que constantemente la intersección se llena de tierra y basura, complicando aún más el tránsito de los vehículos.
“De igual manera por aquí pasan muchos carros de basura que no traen lo que es la protección de los lados. Todo esto de aquí tirando basura los carros para ir al basurero; igual también los dompes que suben por ahí que no llevan protección avientan arena y los carros cuando bajan se derrapan. Hay muchos problemas en este cruce”, resaltó.
Cabe destacar que en esa intersección se ubica el campo de futbol 20 de Noviembre, por esta razón, de manera recurrente niños y jóvenes caminan por ahí.
