Tijuana aprueba uso de vidrios polarizados en nivel medio en vehículos
Recientemente, en la sesión del cabildo de Tijuana, Baja California, se aprobó por unanimidad la modificación del artículo 18 del Reglamento de Tránsito y Control Vehicular, permitiendo el uso de vidrios polarizados en nivel medio. Esta decisión, anunciada por la regidora Gina Arana, presidenta de la Comisión de Vialidad y Movilidad Urbana de la ciudad, responde a múltiples solicitudes ciudadanas y consideraciones médicas.
La solicitud de modificación fue presentada en atención a denuncias sobre casos de extorsión relacionados con el uso de vidrios polarizados, así como la necesidad de su empleo para enfermedades de la piel como el lupus y el melanoma.
Arana señaló:
“Se ha llegado a la conclusión, respaldada por los colegios médicos, de que un nivel medio de polarización es suficiente para proteger a las personas enfermas”.
Para evaluar la viabilidad de esta modificación, se llevaron a cabo mesas de trabajo con el Colegio de Dermatólogos y el Colegio de Oftalmólogos, además de conversaciones con el secretario de seguridad pública y el director de reglamentos.
Se espera que la reforma entre en vigor una vez sea publicada en el Periódico Oficial de Baja California, estimándose este proceso en un lapso de aproximadamente un mes.
La prohibición de vidrios polarizados, establecida en 2007 debido a los altos índices de inseguridad, ya no se justifica, según indicó la regidora. En aquel entonces, los delitos de alto impacto se relacionaban con vehículos que tenían vidrios polarizados, pero actualmente, según el secretario de protección ciudadana de Tijuana, aunque los delitos de alto impacto siguen en aumento, ya no están ligados específicamente a automóviles con este tipo de vidrios.
Enfatizó que el uso de vidrios polarizados de gama alta queda exclusivamente para las corporaciones policiales.
Asimismo, se mencionó la realización de una campaña de difusión a cargo de la alcaldía para informar a la ciudadanía sobre los cambios aprobados, sus derechos y obligaciones al respecto. Además, se planea capacitar a juezas municipales como agentes de tránsito para garantizar el cumplimiento de la normativa.
Esta reforma representa un ajuste significativo en la regulación vehicular, considerando tanto las necesidades de salud de algunos ciudadanos como la evolución de la dinámica delictiva en la región, marcando un nuevo enfoque en la política de tránsito en Tijuana.