Denuncian que reos tienen prohibido hablar con familiares y recibir visitas en Cereso La Paz

La familiar de un interno denunció que los presos tienen prohibido recibir llamadas y mucho menos las visitas semanales de sus seres queridos en el centro penitenciario
0
1994

La madre de uno de los internos del Centro de Readaptación Social (CERESO) de La Paz, denunció por experiencia propia que se aprobaron nuevas políticas de restricción dentro del espacio penitenciario. Según las palabras de la mujer inconforme, los custodios tienen órdenes de no pasar llamadas telefónicas ni admitir visitas cuando los seres queridos de los reos solicitan convivir con ellos.

“Les están negando los derechos de que no se comuniquen con los familiares, yo no sé qué está pasando en el Cereso, pero yo iré a hablar con el director de prevención porque las visitas nos las quitaron por el chubasco que hubo, pero supuestamente el domingo que viene vamos a entrar de visita. Y cada vez que vamos cuando no salen con una cosa salen con otra, yo quiero juntar gente para ir con el gobernador y que se solucione rápido porque ahorita no tenemos director, está el subdirector y las cosas han cambiado ahora que entró este subdirector”.

De acuerdo con la denunciante, los guardias le tienen advertido a los presos que no pueden convivir con sus familias ni mucho aceptar alimentos y artículos personales. Esto se debería a nuevas reglas impuestas por directivos provisionales que asumieron los puestos mientras se designan a nuevos jefes de áreas y hasta a un nuevo director general para que tome el mando de la prisión municipal. Esto fue lo que comentó.

“Lo que pasa es que yo tengo un familiar ahí interno, a mi hijo no le dan permiso para que hable por teléfono, y si un guardia lo llega a ver en el teléfono le grita, le quita el teléfono y lo mete a un área de castigo, y dice mi hijo que supo que lo iba a traer -lázaro- le están violando los derechos, ese es el detalle”.

La jefa de familia agregó que varias esposas, madres y otros familiares de más internos se han contactado con ella para preguntarle como le pueden hacer para saber de ellos y de como la están pasando encerrados en la cárcel.

Una de las alternativas, como lo explicó ella, es acudir con las autoridades estatales para exigirles cambios y que se levanten las prohibiciones que por ley no se deben aprobar ni mucho menos aplicar, para que los presos tengan la oportunidad de interactuar con los miembros de sus familias y que se les haga menos pesado todo el tiempo que permanecen entre las cuatro paredes del Cereso.

EU

Imberth Rondero