Trabajadores desisten de huelga tras llegar a acuerdo por adeudo de sueldos en “El Piojillo”

Alrededor de 300 trabajadores de la construcción desistieron de una huelga laboral tras llegar a un acuerdo por adeudos de sueldo
0
1260
Trabajadores.

Alrededor de 300 trabajadores de la construcción habían amagado con realizar una manifestación en el campo “El Piojillo” de La Paz, tras no recibir el pago de dos semanas de sueldo por las labores de rehabilitación de los espacios deportivos en el espacio de convivencia social.

Sin embargo, los dueños de la empresa que los contrató para realizar sus servicios los reunió para decirles que los pagos caídos serían recibidos en los próximos días. De esta manera, ambas partes llegaron a un común acuerdo para continuar con la obra de remodelación de “El Piojillo” donde se llevan a cabo juegos de futbol, beisbol y otros populares deportes en la capital del estado.

LEER MÁS: 200 trabajadores de “El Piojillo” no han recibido su sueldo desde hace casi una semana; exigen justicia

Los empleados estaban inconformes porque cumplieron 15 días sin el pago de sus sueldos, por lo que decidieron organizarse para un posible paro de labores a manera de protesta contra los representantes de la agencia de construcción con la que firmaron contrato. Al ver interrumpida su fuente de ingresos, algunos de los colaboradores incluso salieron el viernes a botear en el bulevar Forjadores de Sudcalifornia.

No obstante, los contratistas les dejaron en claro que les pagarían su dinero atrasado antes del primero de diciembre, lo que derivó en que los trabajadores siguieran con sus jornadas programadas para terminar el proyecto de expansión y embellecimiento del campo deportivo.

Según el testimonio de un representante de los empleados, más de la mitad del equipo de colaboradores que realizan la remodelación llegaron a trabajar a La Paz desde distintos estados de la República Mexicana, por lo que necesitan sus sueldos en tiempo y forma para poder pagar las rentas de habitaciones de alquiler, las comidas diarias y sus necesidades básicas durante el tiempo que dure el proyecto.

GCC

Imberth Rondero