FIFA pierde la brújula con el Mundial 2026: costos desorbitados para la afición

Boletos, hospedaje y vuelos disparan el gasto para seguir a una selección
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Críticas a seis meses del arranque

El Mundial 2026, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá, enfrenta fuertes cuestionamientos por los altos costos de boletos, hospedaje y vuelos. Asociaciones como Football Supporters Europe (FSE) acusan a la FIFA de haber “perdido la brújula” al imponer tarifas que excluyen a gran parte de la afición.

Boletos: entre la polémica y la rectificación

Los precios iniciales fueron calificados como “astronómicos”. Según FSE, seguir a una selección desde la fase de grupos hasta la final costaría al menos 6,900 dólares.

Ante la presión, la FIFA anunció la categoría “Supporter Entry”, con entradas a 60 dólares por partido, incluso para la final. Sin embargo, en México las entradas más baratas para ver al Tri rondan los 4,955 pesos en estadios como el Azteca.

Vuelos y hospedaje: el otro gran obstáculo

El Mundial 2026 será el primero con 48 selecciones y 104 partidos, lo que implica mayor movilidad entre sedes.

  • Los vuelos internos en Estados Unidos y Canadá elevan el presupuesto de los aficionados.
  • Reportes señalan que los hoteles en ciudades sede como Nueva York, Los Ángeles y Toronto han incrementado sus tarifas hasta en un 40% respecto a años anteriores.

Impacto en la afición

La FIFA busca romper récords de asistencia, pero los costos amenazan con limitar la presencia de los seguidores tradicionales. Para muchos aficionados latinoamericanos, especialmente mexicanos, el gasto resulta prohibitivo pese a que el país será sede de varios partidos.

Contradicciones y exclusividad

Mientras la FIFA presume accesibilidad con boletos de 60 dólares, la realidad es que los paquetes oficiales de hospitalidad superan los miles de dólares. Los gastos de viaje y hospedaje siguen siendo un obstáculo que deja a gran parte de la afición fuera de la fiesta.

El Mundial 2026 promete ser histórico por su formato y número de selecciones, pero la FIFA enfrenta un serio cuestionamiento: los costos desmedidos ponen en riesgo la esencia del torneo, la pasión popular. Aunque se han anunciado medidas para abaratar boletos, la combinación de vuelos caros, hoteles saturados y paquetes exclusivos amenaza con convertir la máxima fiesta del fútbol en un evento inaccesible para la mayoría.

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